Por nombre completo llevó el de Felipe Jacinto Salvador Dalí Doménech. Nació en Figueras, España, el 11 de mayo de 1904. Su padre, un notario de buena posición económica, sustentó los estudios de Salvador en Barcelona y Madrid. En esta última ciudad, entre 1921 y 1926, asistió a la Escuela Nacional de Bellas Artes.
Durante aquella época, el joven artista asimiló cantidad de estilos y teorías sobre el arte. También adquirió influencias del cubismo, el futurismo y de los pintores metafísicos italianos del siglo XX.
Para 1929, Dalí se une a los pintores surrealistas de París. Pronto se convierte junto con Andrés Bretón en uno de los líderes del movimiento. También se pone a la cabeza de la reacción internacional contra el arte abstracto.
Entonces comienza a pintar obras que se distinguieron por algunos motivos freudianos y un simbolismo difícil de descifrar. La intención de sus cuadros era principalmente recrear imágenes que aparecen en sueños y alucinaciones. Pintaba sus imágenes, según sus propias palabras, estando en un delirio erótico. Pero las realizaba con un realismo tan perfecto, que las llamaban "fotografías de sueños pintadas a mano".
Su mano dio a la luz cuadros y dibujos que parecen pertenecer a otros mundos. Muestras de ello son "El juego lúgubre", "El sueño" y, mundialmente famoso, "Persistencia de la memoria o Los relojes blandos".
Dalí, además de pintor, fue ilustrador, diseñador, guionista y escultor; también escribió algunos libros de ensayo (entre ellos, "El diario de un genio") y poesía. Colaboró con Luis Buñuel, García Lorca, Vicente Aleixandre. Su originalidad indiscutible se le ve tanto en su obra como en su persona. Basta decir que él mismo convirtió su casa en Figueras en un museo del surrealismo. Para el horror de
la Iglesia, pintaba a su mujer, Gala, en imagen de la Madre de Dios.
Salvador Dalí murió el 23 de enero de 1989 en un hospital de su natal Figueras, a causa de una insuficiencia cardíaca.